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el kiwi en la alimentación de los mayores

La ingesta diaria de kiwi puede contribuir a prevenir o paliar algunos problemas de salud habituales en personas de edad avanzada. El aumento de la esperanza de vida en los países desarrollados debería comportar un envejecimiento saludable y activo, con una buena calidad de vida ¹^. Los factores individuales que influyen en la salud durante la madurez son la genética, los cambios fisiológicos relacionados con la edad, los hábitos de vida y las posibles enfermedades ²; y sin duda, la alimentación y la actividad física pueden contribuir a mejorarla ¹.

El consumo diario de kiwi podría contribuir a minimizar algunas de las dolencias características de la madurez y mejorar así la calidad de vida en esta etapa. Entre las afecciones más comunes asociadas al envejecimiento, sobre las que el consumo diario de kiwi podría influir positivamente, se encuentran: la diabetes ³, algunas alteraciones gastrointestinales ⁴ y la menor ingesta de ácido fólico, vitamina C y agua⁵.

El kiwi y la diabetes tipo 2

La diabetes tipo 2 es una de las alteraciones más comunes de este grupo de edad ^6,¹. Es una enfermedad que se caracteriza por un estado de hiperglucemia sostenido que, con el tiempo, aumenta el riesgo de complicaciones macrovasculares (enfermedad cardiovascular y cerebrovascular) y microvasculares (retinopatía y nefropatía). Uno de los principales objetivos del abordaje nutricional de la diabetes es mejorar el control glucémico, y para ello es necesaria una pauta de alimentación que permita regular la ingesta de carbohidratos y los niveles de glucemia a o largo del día ⁷. En esta línea, se ha comprobado que el kiwi tiene un impacto glucémico (gramos equivalentes de glucosa / ración) significativamente menor a otras frutas, a los cereales y a la pasta ³. Incluir kiwi en el desayuno o la merienda podría formar parte de las recomendaciones dietéticas en el paciente con diabetes tipo 2.

El kiwI Y EL ritmo intestinal

Durante la madurez existe una elevada prevalencia de estreñimiento. La prevalencia en Europa oscila entre el 2 % y el 35 % (19,2 % de media) en adultos, con un aumento significativo después de los 70 años, y en el caso de las mujeres este incremento se aprecia ya entre los 45 y los 50 años ⁸. La cronicidad del estreñimiento en las personas mayores suele ir acompañada del abuso de laxantes que a menudo conlleva una alteración en la absorción de micronutrientes ¹, hábito que puede agravar un posible déficit de vitaminas y minerales. El kiwi verde es rico en fibra, contiene 3,7 g/ 100 kcal ⁹y se ha observado que su consumo en personas de edad avanzada mejora diferentes parámetros del ritmo intestinal como la frecuencia, la facilidad de defecación, el volumen de las heces y su consistencia ⁴. La ingesta diaria de kiwis puede ser una alternativa natural para prevenir el estreñimiento durante la madurez.

El Kiwi y el ácido fólico

Muchas personas de edad avanzada también suelen consumir dietas excesivamente monótonas y con baja densidad de nutrientes y, en este grupo de población, se han observado deficiencias en la ingesta de ácido fólico (vitamina B₉) entre otros nutrientes¹. Los kiwis Zespri son una fuente natural de ácido fólico (Zespri Green: 38,2 µg/100 g, Zespri SunGold: 31 µg/100 g⁵). Consumir kiwis pelados o con cuchara, o incluidos en ensaladas y macedonias, puede resultar una buena alternativa o complemento a las verduras ricas en ácido fólico que suelen consumirse cocidas, ya que éstas pierden parte de su contenido vitamínico durante el tratamiento térmico.

Por otra parte, con un solo kiwi amarillo (Zespri SunGold) o verde (Zespri Green) se cubren las necesidades diarias de vitamina C, ya que aportan 161,3 mg y 85,1 mg por cada 100 g respectivamente ⁵. Esta vitamina protege las células del estrés oxidativo, favorece la absorción de hierro y mantiene la función normal del sistema inmune ¹⁰.